El P. Nazareno Lanciotte será Beatificado como Mártir

El 14 de abril de 2025, durante la audiencia concedida a Su Eminencia Reverendísima el Sr. Cardenal Marcello Semeraro, prefecto del Dicasterio para las Causas de los Santos, el Sumo Pontífice autorizó al mismo Dicasterio a promulgar, entre otros, el decreto relativo a el martirio del Siervo de Dios Nazareno Lanciotti, sacerdote diocesano; nacido el 3 de marzo de 1940 en Roma (Italia) y muerto en odio a la fe el 22 de febrero de 2001 en São Paulo (Brasil), por el cual será BEATIFICADO como mártir.

El Padre Luca, coordinador mundial del MSM, a comunicado a todos la grande noticia:

“Gracias a Dios y a la Virgen ha llegado la tan esperada noticia, ¡un gran regalo para el Movimiento Sacerdotal Mariano! P. Nazareno fue un signo del poder de salvación que la Virgen puso en el espíritu del Movimiento.”


Nazareno Lanciotti nació en Subiaco (Roma) el 3 de marzo de 1940, hijo de Giacomo y Antonieta Lanciotti. Educado en la fe, entró en el Seminario Diocesano de Subiaco y fue ordenado sacerdote el 29 de junio de 1966. Inmediatamente consagró su sacerdocio a la Virgen en Lourdes.Por cinco años ejerció su ministerio entre los jóvenes de la Parroquia de San Juan Crisóstomo, en el centro de Roma. En noviembre de 1971 se trasladó a Jauru, pueblo de Mato Grosso (Brasil) en la frontera de Bolivia. Llevó el Evangelio durante 30 años. Incansable misionero, más allá de todos los obstáculos y sufrimientos por amor a Cristo y a las almas. Hizo de Jauru y su sector un modelo de desarrollo urbano (escuela, hospital, asilo) y cristiano (iglesia y santuario dedicado al Inmaculado Corazón de María, formación de los laicos y, por un tiempo, un pequeño seminario); 58 capillas entrecruzan su enorme sector parroquial, por lo que vivió su apostolado desde la adoración eucarística.

En 1982 se encontró con el Movimiento Sacerdotal Mariano, y Don Stefano Gobbi, su responsable internacional, lo nombró responsable de Brasil, con lo que regularmente reunía a los responsables locales de retiros-cenáculos, lo que permitió un desarrollo extraordinario del Movimiento en Brasil, es decir, lo que llevó a mucha gente a consagrarse a María, para vivir un fuerte compromiso de unión con el Papa y de difusión mariana.

Don Nazareno se había puesto en primera fila para oponerse a los traficantes de drogas y la prostitución, que se aprovecharon de la proximidad de la frontera para su tráfico local e internacional. Su compromiso con la juventud (sin necesidad de discotecas o Carnaval) y también con la vida (contra el aborto, la anticoncepción, la eutanasia en su hospital y asilo) están entre las causas de su asesinato, que probablemente, se decidió era alcalde un candidato favorable a la Iglesia Católica y no otro candidato masón.

La tarde del 11 de febrero de 2001, fiesta de la Virgen de Lourdes, mientras cenaba en la casa parroquial junto con ocho amigos, dos hombres armados con pistolas entraron y fingieron querer dinero. Pretenden jugar a la ruleta rusa con los presentes, pero calculan para llegar al Padre Nazareno. Los asistentes lo vieron palidecer cuando el asesino se acercó a él para decirle una palabra en el oído. En el momento de los disparos, Don Nazareno hizo un movimiento, y la bala en vez de matarlo de inmediato, se alojó en la nuca. Fue hospitalizado durante diez días, todavía consciente, en medio de su terrible sufrimiento, pudo confiar (estando presente Don Gobbi), lo que le había dicho el bandido: “Soy el diablo, vine aquí a matarte, porque tú me molestas demasiado”. Padre Nazareno testificó que, efectivamente, cuando el asesino dijo esto, ya no veía la máscara del villano, sino la cara del demonio.

Don Nazareno, además de la imagen de la Virgen de Fátima, rodeado por las palabras “Inmaculado Corazón de María, mi confianza, mi salud, mi victoria”, además de un gran retrato de San Juan Pablo II y Don Gobbi y una gran representación del “sueño de las tres blancuras” de San Juan Bosco, puso también en su Santuario una imagen de la Divina Misericordia. Murió precisamente el día 22 de febrero, cuando se cumplía el 70 aniversario de la revelación del Salvador Misericordioso a Santa Faustina Kowalska. Ese día además fue significativo: era la Fiesta de la Cátedra de San Pedro. Don Nazareno tuvo siempre gran adhesión al Papa. Adquirió por miles la carta apostólica “Novo milenio Innuente” de San Juan Pablo II. El día anterior al ataque había dicho a sus jóvenes: “Si les proponen la opción entre un coche o esta carta, ¡elijan la carta!”.

Fue enterrado en la Iglesia que levantó, cerca del Sagrario con la inscripción evangélica: “Si el grano de trigo cae en tierra y muere, da mucho fruto”. El proceso de beatificación por la vía del martirio se inició en 2007.

Esta web utiliza cookies propias para su correcto funcionamiento. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Ver Política de cookies
Privacidad